...el viernes en la noche lloré mucho, (...) es que no sé porqué… siempre lo doy todo… siempre les doy a los demás todo y dejo que lo tomen, yo me quedo sin nada, me quedo vacío, les doy todo lo bueno de mi, lo bonito y lo puro, lo que realmente me hace sonreír o reírme, o sentirme bien, y me quedo con todo lo malo, con lo triste y lo feo, con lo que me hace llorar y tener pensamientos suicidas y … no sé… ellos no se dan cuenta, no se dan cuenta de lo mucho que me duele quererlos (amarlos) tanto… no se dan cuenta que a veces siento que son todo, que mi vida les pertenece, que ellos tienen todo el poder, absoluto sobre mi, sé que no es cierto… ahora lo sé, ahora que estoy sobrio, que puedo ver las cosas, con claridad, y no a través de ese vidrio que pone las cosas oscuras, y un escenario en el que la vida no es realmente vida sin ellos, no tiene importancia, no tiene caso, no soy lindo, no soy sano, no soy divertido, soy un raro (…).
Es… todo… es mi mundo, mi fantasía, mi perfección, mi utopía… pero también es destrucción, es dolor, desesperación, angustia, impotencia… ¿y qué sentimiento peor que la dependencia?, ¿qué cosa más horrible y desesperante que la adicción?, pero supongo que estoy en esa etapa de sonreír por fuera para ver si por dentro algún día también sonrío… ¿a quién engaño? La ausencia de todos me hace mal… (…)
Quisiera ser bueno (…), no quiero que los demás sólo vean al niño malo que hay dentro de mi, quiero que vean lo bonito que soy por dentro, lo gracioso, lo divertido, me gustaría que me conocieran, me dejaran de criticar y me abrazaran, se dieran cuenta de mis lágrimas, mi soledad, mi necesidad de risas, de olvidarme de todo lo malo, lo feo, lo oscuro (…)
(…) Y ella no se da cuenta… y ella me deja sufrir (…)
Y después de todo… ¡BOOM! (…) como si todo el dolor se pudiera compensar oyendo su voz, como si pudiera volver a ser feliz así, como si todas esas risas, borraran las lágrimas (…) prometiéndome, confesándome, ¿mintiéndome?... no lo sé, y no sé si creerlo.
Dios me compensa (...), creo que empiezo a entender este paranoico e histérico mundo, las cosas son así, como una balanza, por cada cosa buena, una mala, y viceversa… El viernes que me estaba gritando cosas, entre lágrimas y desesperación, recuerdo que dije: "¡Y siempre es así!, Cuando pienso que por fin me pasa algo bueno, cuando creo que por fin encuentro alguien en quien confiar, alguien con quien de verdad cuento, de pronto me doy cuenta que ¡Es mentira! ¡Todo es mentira! ¡Y no es cierto! ¡Todos me quieren lastimar! ¡Todos me quieren hacer daño!”.Y es que es muy fácil verlo ahora, que como dije antes, estoy sobrio, es muy fácil verlo desde el punto de vista: “por cada cosa MALA, una BUENA”, el problema es cuando es: “Por cada cosa BUENA, una MALA”, entonces no es tan optimista, no es tan aliviante, ya no es lindo, ni reconfortante, y es cuando empiezan mis problemas, pero, al menos entiendo que todo eso es por mi bien, y al final, soy yo quien gana, pues todo eso me hace ser más fuerte, y me hace creer más, en Dios, (…) tal vez en mi mismo, y puedo entender que tal vez hoy el cielo esté gris, pero mañana va a estar soleado, y va a estar fresco (cosa que odio pero supongo que es bueno).
Después de todo, los prehispánicos hacían sacrificios humanos, con sangre y cuchillos, para el Dios del Sol, para que el Sol volviera a salir… y creo que ahora entiendo… ¡Es cierto!, a veces tienes que sacrificarte, tiene que haber un poco de sangre y dolor, y sufrimiento y tristeza humana, para que al siguiente día el sol salga, y sea un día nuevo, tal vez feliz, triste, o neutral, pero nuevo, al fin y al cabo nuevo, y de nosotros depende que sea mejor o peor. ¿No crees...?
110309.1243.faltan9.15
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1 comentarios:
putaa qé lindo lo qe escribes ws, todo porqe se parece a mi caso x(!
moriré hueón T.T !
el amor es una caGaada!!!
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